Durante ese tiempo, realicé un internado como manejadora de crisis, respondiendo a las necesidades inmediatas de la comunidad. También trabajé como consejera en una línea de manejo de crisis, brindando apoyo emocional en momentos de alta vulnerabilidad. Fue allí donde descubrí el tema que realmente me apasiona: el manejo de crisis y la importancia de la educación y visibilidad en torno al suicidio.

Mucho antes de comenzar mis estudios, siempre sentí una gran vocación por escuchar, acompañar y ayudar a las personas a encontrar soluciones. Desde joven participé como voluntaria en distintas organizaciones, buscando maneras de servir a mi comunidad.

En la escuela superior tuve la fortuna de conocer a una trabajadora social que me acompañó en un momento difícil y me inspiró profundamente a seguir esta carrera. Gracias a esa experiencia comprendí el valor del apoyo humano y el poder transformador de la empatía.

Mi mayor anhelo es compartir lo que he aprendido —tanto en el camino académico como en la vida misma— para acompañarte en tu proceso de sanación y crecimiento.


No te mentiré: sanar no siempre es fácil. Requiere tiempo, esfuerzo y compromiso. Pero estoy aquí para recordarte que vale la pena, y que no tienes que hacerlo sola(o).